15 julio 2011

Los productos forestales serán los materiales del futuro

visto en farodevigo.es

Una tesis de Forestales revela que el uso de la madera mitiga los efectos del cambio climático

LAURA PAREDES - PONTEVEDRA
La tarima flotante, los corchos de las botellas, las suelas de los zapatos, los marcos de las puertas y ventanas, las barricas e incluso determinados materiales informáticos ayudan a mitigar el cambio climático. Estudios científicos evidencian que la madera será el material del futuro, se adapta a todos los usos y aunque hay que aprender a manejarla y diseñarla correctamente cualquier persona que la use podrá contribuir a combatir el cambio climático. ¿El motivo? La madera se convierte en un almacén temporal de carbono. Hasta tal punto que "el carbono neto almacenado en los productos de madera fabricados durante un año equivale a todos los gases que emiten los tubos de escape de dos millones de coches circulando 15.000 kilómetros al año". Estos son algunos datos que revela la tesis de doctoramiento de la directora general de la Asociación Nacional de Fabricantes de Tableros, Genoveva Canals, dirigida por el director de la Escuela de Ingeniería Forestal de Pontevedra, Enrique Valero, y el profesor Juan Picos.
Almacenes de carbono
Pontevedra se convierte así en la ciudad pionera en España en la investigación del almacenamiento del carbono de los productos de madera. El estudio a nivel nacional pretende cuantificar el papel que los productos pueden desempeñar frente al cambio climático. Su autora explicó el proceso que sigue el CO2 en los bosques. "La madera, los árboles y los bosques en sí, fijan CO2 en la madera. Ese árbol se transforma en producto y el CO2 queda atrapado toda la vida útil del producto".
De este modo, el estudio se propuso analizar cómo se comportaba la madera en España (otros países europeos ya han realizado estudios similares) y tras valorar si actuaba como almacén o como emisor de carbono llegaron a la conclusión de que la madera española "prolonga la vida del carbono en el producto, ya que queda secuestrado en él, actuando como almacenes temporales". Canals señaló que este descubrimiento es "una herramienta básica para combatir el cambio climático, pero lo más importante quizá sea pensar que existe capacidad de mejora, de incrementar la fijación de carbono si aumenta el uso de la madera. Ahora las políticas internacionales tienen una posición activa para incorporar productos de la madera a los nuevos requisitos del Protocolo de Kioto que hasta este momento no contemplaba la contabilidad de los productos de la madera de cada país como parte de la gestión para contribuir a mitigar el cambio climático", matizó.
La investigadora apuntó que, aunque los datos son positivos, pues el stock disponible cubriría casi el 4% de las emisiones del país, "tenemos mucha capacidad para mejorar" y propone impulsar el uso de objetos de madera con el sector de la construcción como clave en este proceso. Esta nueva utilidad de la madera como fuente de almacenamiento de carbono puede suponer un revulsivo interesante para el sector forestal gallego. El director del centro destacó que en Europa se prevé un déficit de 300 millones de toneladas de madera anuales "una oportunidad para mejorar nuestra presencia en Europa".

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