08 agosto 2012

Programas Life+ para dos especies casi desconocidas: El desmán y el garbancillo

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Garbancillo de Tallante (Astragalus nitidiflorus) Foto: Nanosanchez


Desmán ibérico. Foto: David Pérez-Wikipedia.
visto en elpais.es

Entre los últimos proyectos aprobados del programa Life+ (financiados por la Comisión Europea) dados a conocer recientemente hay 47 españoles, lo que convierte a nuestro país en el que más iniciativas consiguió sacar adelante. Esta vez, entre los vinculados a la biodiversidad, no hay ninguno que tenga como protagonista al oso pardo, el lince ibérico o el águila imperial. Por el contrario, destacan dos proyectos centrados en especies casi desconocidas, pero que reúnen peculiaridades que las hacen únicas. Se trata del desmán ibérico (Galemys pyrenaicus) y del garbancillo de Tallante (Astragalus nitidiflorus); mamífero y planta cuya área de distribución mundial se circunscribe a la península Ibérica.

Realmente, el mapa de distribución mundial del garbancillo de Tallante, una leguminosa silvestre emparentada con garbanzos y guisantes, es todavía más reducida: el Campo de Cartagena (Murcia), y más concretamente en los municipios de Tallante y Cabezos del Pericón. Hasta hace escasamente siete años se la daba por extinta, pero en 2004 se detectaron nuevas poblaciones y sin dilación pasó a ser declarada de forma oficial en peligro de extinción en el Catálogo Español de Especies Amenazadas. La Asociación de Naturalistas del Sureste (Anse) emprendió entonces, junto al Gobierno de la Región de Murcia y la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), un programa para asegurar su supervivencia y se señaló a los propietarios de fincas como colaboradores necesarios.



Garbancillo de Tallante.

“Hay que tener en cuenta que esta planta no es muy exigente con el suelo y crece en terrenos marginales, en los límites entre cultivos y el monte, por lo que nos encontrábamos con agricultores que pasaban el tractor por esa zona dentro de su finca y se cargaban poblaciones enteras”. Jorge Sánchez, biólogo y técnico de Anse, resume un trabajo de acercamiento y concienciación de esos agricultores que ha dado frutos positivos. Paralelamente, la asociación realizó un cultivo experimental, supervisado por la UPCT, en reservas que gestiona, para “poner a punto la metodología de reintroducción y demostrar que la siembra directa es la mejor opción”, resume Sánchez. Se espera que el proyecto Life+ aprobado acelere ahora dos de los objetivos prioritarios para asegurar su conservación: la aprobación de un plan de recuperación y la creación de reservas por parte del Gobierno murciano. Una ventaja es que la iniciativa, denominada Conservastragalus-MU (por el nombre científico del garbancillo: Astragalus nitidiflorus), la coordina la propia UPCT.

Desmania es el nombre del proyecto Life+ que tiene a otra especie casi desconocida como objetivo de conservación. El desmán ibérico pertenece a la familia de los topos, aunque tiene un hocico mucho más largo (es más bien trompa), vive en el agua, es de hábitos nocturnos y muy poca gente, incluidos biólogos y naturalistas que desde años le siguen la pista, lo ha logrado ver en libertad. Solo otra especie de desmanino, el desmán ruso, sobrevive en el planeta, y solo determinados cauces de aguas rápidas, claras y frescas de la mitad norte peninsular conforman su hábitat. Como en el caso del garbancillo de Tallante, se desconoce el número de ejemplares que sobreviven, aunque se estima que es tan escaso como para considerar en peligro de extinción su población en el Sistema Ibérico y como vulnerables las del resto de su área de distribución.

El presente Life+ pretende invertir la tendencia demográfica negativa de esta especie endémica de la península Ibérica, y empezará con algo que también falta, un estudio meticuloso de su situación que sirva de base para “las actuaciones de conservación en varios lugares de la red Natura 2000 dirigidas a mejorar la situación de los hábitats clave para el desmán ibérico”. En este caso, la zona objeto del estudio se centra en Castilla y León y norte de Extremadura. Con anterioridad, uno de los trabajos más exhaustivos para conocer su presencia y distribución lo llevaron a cabo los biólogos Pere Aymerich y Joaquim Gosálbez en 766 tramos fluviales del Pirineo, confirmando que casi ha desparecido de Aragón y que cualquier alteración de estos cauces, por mínima que sea (canalizaciones, contaminación y alteración de riberas principalmente), puede provocar efectos muy negativos sobre estas poblaciones.

La Fundación Biodiversidad coordina Desmania, en el que participan ocho organismos más. Tanto el estudio mencionado de los Pirineos como los trabajos de la asociación Galemys (Galemys pyrenaicus es el nombre científico del desmán) servirán de apoyo al proyecto Life+. En la Fundación Biodiversidad explican por qué se ha elegido una zona donde la especie no está en peligro de extinción: “Hay que conseguir que las poblaciones en menor riesgo no lleguen a una situación tan dramática como las del Sistema Ibérico, y por eso se va a trabajar en zonas donde tengamos mayor capacidad para actuar y haya mayores posibilidades de recuperación para la especie”. Como en el caso del garbancillo de Tallante, también aquí la iniciativa servirá para sentar las bases de la estrategia nacional de conservación del desmán ibérico y de los futuros planes de recuperación que aprueben las comunidades autónomas.



Información extendida por CSIC:

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